Miércoles, 20 de septiembre de 2023 Por Ramiro Guerra. Abogados y cientista político.  El caballo de hierro, en un vagón privado, trasladaba a los reyes magos hacia Colón. No llevaban mirra, incienso y oro, sino sacos de promesas. No eran tres reyes magos, sino los candidatos a la presidencia del país. No soy pesimista, pero nada diferente a las tonadas vistas y oídos en pasadas elecciones. Un baño de pueblo, a la cual se recurre pérfidamente cada cuatro años.
Un candidato, prometió construir una estación de bomberos en la zona libre de Colón; otro habló de poner orden reforzando la fuerza pública; se ve que, no sabe, la paz pública depende de la justicia social y así se fue desarrollando el cuento. La embajadora, ahora de Chaperona, habló de la instalación de un centro dirigido a mejorar a Colón y destacar lo mejor del colonense. Solo que se enredó, habló de relaciones de Colón con los Estados Unidos. ¿acaso los Estados Unidos, está pensando independizar a Colón. Bueno, otro desatino.

Se habló mucho de promesas; yo voy a hacer y hacer.

No se puede hablar de desarrollo de Colón, sin tener como actores principales a los colonenses. Es la principal fuerza motriz. El expresidente Martín y la economista Maribel Gordón, fueron más concretos. Hablar del desarrollo de Colón, no es sólo de la ciudad, sino de toda la provincia.