Jueves, 18 de noviembre Andrés Álvarez Rueda En este particular queremos destacar a José Eulogio Torres Abrego, quien hace un estudio a través de su libro Población, Economía y Sociedad en Panamá y su desarrollo económico dentro del proceso de industrialización para la sustitución de importaciones en el país y que coincide con la posguerra durante los años de 1939, 1968 y 1970 como parte de los seis periodos de la historia del istmo.
El afirma que la clave para comprender las contradicciones de los tiempos tiene que ver con el proceso de industrialización y destaca ese conflicto que se dio entre los diferentes sectores. Enfatiza que el nuevo modelo agro productor de crecimiento hacía fuera entraba en contradicción con el modelo comercial- importador de expansión hacia fuera; característica propia de la nación panameña.
Y que en vez de ver un conflicto en término de comercio, el más bien una abundante riqueza de diversidad en sus fuentes de enriquecimiento productivo lo que afirma que sería no contradicción sino más bien resultados complementarios.
La Segunda guerra mundial y los inicios de la industria en Panamá
En este periodo señala el estudioso y hace énfasis en la condición difícil que se dio sobre el momento de esta guerra y luego de la post guerra hubo una recesión bien visible que hizo temblar la economía de nuestro país y que se vio agravada por circunstancias que se dio en nuestro país que a continuación destacamos:
Primero la llegada de tropas estadounidenses durante la conflagración dada en Panamá. A tal punto que estos soldados se esparcieron en más de 100 sitios que se encontraban en todo el país incluyendo la zona del canal de Panamá, hechos ocurridos durante el año 1940 y que la llegada de estos soldados al país permitió un auge económico como nos cuentan y añoran muchos señores y señoras quienes recuerdan esos tiempos de bonanza; eso en todas las áreas como el servicio de taxis, restaurantes, hoteles, fiestas nocturnas, como así lo expresan muchos al recordar esos tiempos.
Fue así que en este periodo se dio inicio lo que hoy llamamos industrialización en el Panamá comenta José Elogio Torres Ábrego. Se destaca entonces que el 10 de agosto de 1945 se crea lo que es hoy en día el Sindicato Industrial de Panamá (SIP), esto durante una reunión organizada por la Cámara de Comercio e Industria y Agricultura de Panamá que según los informes que se tienen en aquel entonces estaba ubicada en la casa 6 de la Calle 50 de San Felipe. Una organización que fue organizada con el fin de proteger sus esfuerzas, trabajo y empresas por parte las políticas populistas de los gobiernos, situación que lo que querían estos últimos era controlar lo relacionado a los conflictos entre obre. Es en ese instante que se creó el primer código de trabajo. Se crea la constitución de 1946.
Otro de los beneficios que se obtuvieron con todo esto es que se buscaba darle la oportunidad a empresarios panameños, extranjeros tener la oportunidad de diversificar sus productos, sus empresas o negocios.
Economía de la Post Guerra Industrialización
Al culminarse la guerra se dio una afectación económica, se disminuyó la cantidad de soldados estadounidenses comparando este acontecido con lo que dice la Biblia referente a la abundancia de las vacas gordas y las vacas flacas. Porque hasta los contratos de bienes y servicios en la Zona del Canal disminuyeron lo que nos dice que la economía de abundancia y prosperidad. Llega el interés por parte de los empresarios y negociadores del país que aprovecharon la coyuntura para ayudar a Panamá lo que es levantar la economía. Situación que se presto para impulsarla a través de la agricultura y la industria.
La figura de coronel José Remón Cantera toma posesión como presidente el 1 de octubre de 1952 y como parte de su discurso dijo que en su gestión estaría dando completo apoyo capital invertido de manera que permitiera fortalecer la economía del país y facilitar por los medios legales para que se diera el crecimiento necesario. Declaraciones que se hizo realidad, pero también fue tomado como ejemplo para ponerlo en práctica como así fuera por parte de las motivaciones a realizar por parte de Marcos Robles, Roberto F. Cheari, Ricardo Arias Espinosa, y Ernesto de la Guardia.
Se destaca la personalidad de Remón Cantera, quien lucha por hacer valer los derechos que debería tener Panamá en lo que respecta al Canal Interoceánico exigiendo a los Estados Unidos concesiones que ampliaran la participación de Panamá en las actividades comerciales y financieras. De aquí pues la frase “Ni millones, ni limosnas. Exigimos Justicia”.
Importante señalar que el esfuerzo de Remón Cantera tuvo sus resultados positivos, quien a pesar de su asesinato el 2 de enero de 1955 se lograron obtener grandes concesiones con los Estados Unidos en lo referente al área económica o financiera durante el quinquenio entre 1956 a 1961 lográndose una expansión de crecimiento anual industrial de 7.6%.
Importante señalar al ya fallecido sociólogo Marcos Gandasegui por sus escritos donde divide en tres grupos los ciudadanos en Panamá que tenían en sus manos el poder económico de país durante los alrededores de 1960 en ellos las familias separatistas representadas por familias de línea colonial como Chiari, Duque y Arias Espinos; Segundo Grupo: Las 2 generaciones conformada por los descendientes de emigrantes extranjeros compuestos por aquellos que llegaron con el inicio de la construcción del Canal de Panamá o la segunda Guerra Mundial entre ellos Los Eleta, Novey, Pascual, Gago, Tagarópulos y por último el grupo Hebreo conformadas por los emigrantes del siglo XIX.
Otro punto tratado por el sociólogo Gandasegui es que se pudo ver el apoyo, las alianzas, la colaboración y participación entre los propios empresarios; diferentes al estilo de las clases inter- burguesas.
El sector Industrial se desarrolló en gran manera durante los años de 1970 y los inicios del 2080 a tal punto que se muestra la repetición del patrón añadiendo sus inversiones al sector bancario y financiero.
Como conclusión: La inestabilidad social, Las permanentes protestas y la violencia en el campo y la sociedad trajo como consecuencia durante los años 50 y a lo largo del 60 expresan las desigualdades. Lo que nos dice que la situación que vive Panamá en tema de delincuencia no es propicio ni favorable para el desarrollo de la economía del país por lo que hacemos un llamado al gobierno de turno a implementar estrategias que fortalezcan la seguridad, la propia economía, la paz y bienestar de todos los ciudadanos. No es fácil; pero tampoco es imposible,