GAVI FLORES         Hoy quiero continuar hablando de la contaminación, como recuerdan en nuestra séptima entrega estuvimos hablando de la contaminación en general y de los 7 tipos de esta, de más relevancia entonces partiendo de hoy estaremos ampliando la información con referencia a estos 7 tipos de contaminación, así hablaremos de la CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA.

La contaminación atmosférica es la presencia en el aire de materias o formas de energía que implican riesgo, daño o molestia grave para las personas y seres de la naturaleza popular, así como que puedan atacar a distintos materiales, reducir la visibilidad o producir olores desagradables y enfermedades.

Desde que la Revolución Industrial inició en la segunda mitad del siglo XVIII, los procesos de producción en las fábricas, el desarrollo del transporte y el uso de los combustibles han incrementado la concentración del dióxido de carbono en la atmósfera y otros gases que son muy perjudiciales para la salud, como los óxidos de azufre y los óxidos de nitrógeno.

La contaminación atmosférica puede tener carácter local, cuando los efectos ligados al foco se sufren en las inmediaciones de este, o global, cuando por las características del contaminante, se ve afectado el equilibrio del planeta y zonas alejadas a las que contienen los focos emisores. Ejemplos de esto son la lluvia ácida y el calentamiento global.

 

Según la Organización Mundial de la Salud, el estado de la atmósfera actual provoca, por simple acto de respirar, la muerte a alrededor de siete millones de personas al año (respiración de partículas finas), viéndose muchas más perjudicadas.

La contaminación atmosférica consiste en la liberación de sustancias químicas y partículas en la atmósfera alterando su composición y suponiendo un riesgo para la salud de las personas y de los demás seres vivos.

Los gases contaminantes del aire más comunes son el monóxido de carbono, el dióxido de azufre, los clorofluorocarbonos y los óxidos de nitrógeno producidos por la industria y por los gases producidos en la combustión de los vehículos.​ Los fotoquímicos como el ozono y el esmog se aumentan en el aire por los óxidos de nitrógeno e hidrocarburos y reaccionan a la luz solar. El material particulado o el polvo contaminante en el aire se mide por su tamaño en micrómetros, y es común en erupciones volcánicas.

 

CONTAMINANTES ATMOSFÉRICOS PRIMARIOS Y SECUNDARIOS

 

Los contaminantes primarios son los que se emiten directamente a la atmósfera como el dióxido de azufre SO2, que daña directamente la vegetación y es irritante para los pulmones.

Los contaminantes secundarios son aquellos que se forman mediante procesos químicos atmosféricos que actúan sobre los contaminantes primarios o sobre especies no contaminantes en la atmósfera.​ Son importantes contaminantes secundarios el ácido sulfúrico, H2SO4, que se forma por la oxidación del dióxido de azufre SO2, el dióxido de nitrógeno NO2, que se forma al oxidarse y el ozono, O3, que se forma a partir del oxígeno O2.5​

Ciclo de condensación y precipitación

Ambas clases de contaminantes, primarios y secundarios pueden depositarse en la superficie de la Tierra por precipitación, deposición seca o húmeda e impactar en determinados receptores, como personas, animales, ecosistemas acuáticos, bosques, cosechas y materiales de diferentes tipos. En todos los países existen unos límites impuestos a la emisión o la concentración de determinados contaminantes que pueden incidir sobre la salud de la población y su bienestar o causar un impacto en el entorno.

Efectos de los gases de la atmósfera en el clima

El efecto invernadero evita que una parte del calor recibido desde el sol deje la atmósfera y vuelva al espacio. Esto calienta la superficie de la Tierra. Existe una cierta cantidad de gases de efecto de invernadero en la atmósfera que son absolutamente necesarios para calentar la Tierra, pero en la debida proporción. Actividades como la quema de combustibles derivados del carbono aumentan esa proporción y el efecto invernadero aumenta. Muchos científicos consideran que como consecuencia se está produciendo el calentamiento global. Otros gases que contribuyen al problema incluyen los clorofluorocarbonos (CFC), el metano, los óxidos nitrosos y el ozono.

Daño a la capa de ozono: el ozono es una forma de oxígeno O3 que se encuentra en la atmósfera superior de la tierra. El daño a la capa de ozono se produce principalmente por el uso de clorofluorocarbonos (CFC). La capa fina de moléculas de ozono en la atmósfera absorbe algunos de los rayos ultravioletas (UV) antes de que lleguen a la superficie de la tierra, con lo cual se hace posible la vida en la tierra. El agotamiento del ozono produce niveles más altos de radiación UV en la tierra, con lo cual se pone en peligro tanto a plantas como a animales.

Efectos nocivos para la salud

Muchos estudios han demostrado enlaces entre la contaminación y los efectos para la salud. ​ Mediante la disminución de los niveles de contaminación del aire los países pueden reducir la carga de morbilidad derivada de la contaminación del aire.

Los aumentos en la contaminación del aire se han ligado a quebranto en la función pulmonar y aumentos en los ataques cardíacos. «Niveles altos de contaminación atmosférica según el Índice de Calidad del Aire de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) perjudican directamente a personas que padecen asma y otros tipos de enfermedad pulmonar o cardíaca». La calidad general del aire ha mejorado en los últimos 20 años, pero las zonas urbanas son aún motivo de preocupación. Los ancianos y los niños son especialmente vulnerables a los efectos de la contaminación del aire.

El nivel de riesgo depende de varios factores:

La cantidad de contaminación en el aire.

La cantidad de aire que respiramos en un momento dado.

La salud general.

Otras maneras menos directas en que las personas están expuestas a los contaminantes del aire son:

El consumo de productos alimenticios contaminados con sustancias tóxicas del aire que se han depositado donde crecen.

Consumo de agua contaminada con sustancias del aire.

Contacto con suelo, polvo o agua contaminados.

Los síntomas más comunes que se presentan en la salud humana a causa de la contaminación atmosférica son:

Mareos fuertes e intensos dolores de cabeza.

Si el aire contaminado se inhala en gran cantidad puede ocasionar la muerte.

Según un estudio publicado en la revista Cardiovascular Research, la contaminación atmosférica podría haber aumentado en un 15% las muertes por COVID-19 a nivel mundial. Este porcentaje es más elevado en países con altos niveles de contaminación atmosférica como China, Alemania y Francia.​ Los principales contaminantes atmosféricos responsables de este fenómeno son aquellos que se agrupan en la categoría PM2.5 Estos contaminantes afectan al sistema respiratorio humano de la misma forma que el virus responsable del COVID-19. La probabilidad de que ambos efectos se potencien aumenta en niveles de exposición prolongada a contaminantes PM2.5

Para ampliar esta información los PM2.5, son partículas muy pequeñas en el aire que tiene un diámetro de 2.5 micrómetros (aproximadamente 1 diezmilésimo de pulgada) o menos de diámetro. Esto es menos que el grosor de un cabello humano. La materia particulada, es una mezcla que puede incluir sustancias químicas orgánicas, polvo, hollín y metales. Estas partículas pueden provenir de los automóviles, camiones, fábricas, quema de madera y otras actividades.

Y hasta aquí con la información a cerca de la contaminación atmosférica, me despido no sin antes recordarles la invitación a formar parte de las estrategias comunitarias para el cuidado del medio ambiente, y también a formar parte de nuestra audiencia activa, participando en el chat de vistazo online dejando sus comentarios y temas sugeridos.

Les deseo una excelente semana. Hasta pronto.