Lunes, 10 de octubre de 2022   Panamá ha crecido gracias a la interacción de un circulo virtuoso entre trabajadores y empleadores, dentro del cual se han desarrollado como profesionales hombres y mujeres honrados que son la maquinaria de la iniciativa privada; así como, todos esos valientes emprendedores que decididamente desarrollan sus negocios, creando nuevas oportunidades de empleo para sus conciudadanos. La economía y el bienestar de quienes vivimos en Panamá dependen de la existencia y balance de esta dinámica.

En este sentido, en la medida que existan las condiciones para que la empresa privada pueda desarrollar sus actividades de emprendimiento sin cargas ni regulaciones excesivas del Estado, estas serán capaces de crear plazas de empleos, lo que en consecuencia dinamizará el consumo, y provocará la generación de nuevos puestos de trabajo. De allí que, históricamente el sector privado haya sido el motor de la economía panameña.

Reiteramos que no somos ajenos a los problemas coyunturales y estructurales que enfrentamos como país, y que en todo momento hemos estado dispuestos a contribuir en encontrar soluciones con el fin de eliminar disparidades y lograr una sociedad más equitativa con acceso a oportunidades, por lo que hemos participado en múltiples diálogos con este norte, y de donde han surgido ya acciones consensuadas que consideramos deben entrar en ejecución cuanto antes.

Ante un nuevo llamado a dialogar, donde se considera la inclusión del sector empresarial, subrayamos que, para ser parte, este tiene que darse en el marco del respeto, con un mediador idóneo, que ayude en la definición de una metodología que permita representatividad y condiciones equitativas a actores legítimos que persigan objetivos reales. Aunado a que, cualquier diálogo tiene que contar con la información técnica necesaria que permita llegar a consensos con sustentos, y respetando los derechos constitucionales de todos los ciudadanos. Sin estas condiciones, se trataría de un espectáculo poco constructivo que no suma y, más bien, resta.

Definitivamente que vivimos el cambio de una era, donde el país se encuentra en un proceso de transformación importante y la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá, como gremio representativo del sector privado panameño, pretende formar parte de este cambio, buscando aportar al desarrollo de un Panamá más equitativo, con oportunidades para todos y que apueste a un crecimiento transversal sostenible en el tiempo. A lo que nunca se podrá sumar es a procesos que pretendan destruir por completo el motor que ha significado trabajo honrado, crecimiento profesional y ventana de oportunidades para los panameños.