Miércoles, 4 de enero de 2023 POR ALDGRA FREDLY    La líder de Taiwán declaró el domingo que su país está dispuesto a ayudar a China a hacer frente al reciente aumento de infecciones por COVID-19, a pesar de las crecientes tensiones entre ambos lados del estrecho con el Partido Comunista Chino (PCCh), en el poder.

El mes pasado, el PCCh abandonó abruptamente su draconiana política de cero COVID-19, al mismo tiempo que aumentaban las protestas masivas contra las duras restricciones impuestas a la vida en China. A lo largo de diciembre, los chinos informaron que los servicios de salud del país se estaban viendo desbordados por el rápido aumento de casos.

Se calcula que hasta 37 millones de personas al día contraen el virus en China, según las actas filtradas de una reunión del máximo organismo sanitario del país confirmadas por múltiples medios de comunicación.

“Somos conscientes de que la situación pandémica se ha agravado recientemente en China”, declaró la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, en su discurso de Año Nuevo el 1 de enero.

“Si es necesario, estamos dispuestos, por interés humanitario, a proporcionar la asistencia necesaria para ayudar a más personas a superar la pandemia y disfrutar de buena salud y tranquilidad en el nuevo año”, añadió.

Tsai no especificó la naturaleza de la ayuda que Taiwán ofrecería a China.

Taiwán ha impuesto la prueba PCR de saliva a todas las llegadas procedentes de cuatro ciudades chinas —Beijing, Shanghái, Chengdu y Xiamen— del 1 al 31 de enero.

La política de pruebas también se aplicará a las llegadas desde las islas periféricas taiwanesas de Kinmen y Matsu. Los viajeros de Hong Kong y Macao no están sujetos a estas medidas.

La oferta de Taiwán
Alex Tan, profesor de relaciones internacionales de la Universidad de Canterbury, dijo que no está claro si Taiwán tiene capacidad para ayudar al continente a combatir la oleada de COVID-19, porque la isla también tiene escasez de medicamentos.

“Los taiwaneses podrían [proporcionar a China] equipos de protección personal. Pero no estoy muy seguro de si en el aspecto médico Taiwán sería capaz de ayudar porque también son relativamente escasos”, declaró el lunes a los medios de comunicación australianos.

La gente espera atención médica en el área de la Clínica de la Fiebre en el Hospital Tongren en el distrito de Changning en Shanghái, el 23 de diciembre de 2022. (Hector Retamal/AFP vía Getty Images)

Tan añadió que es poco probable que China acepte la oferta de Taiwán y que podría imponer condiciones previas difíciles de cumplir para Taiwán. Señaló que Tsai indicó su intención de trabajar con el PCCh durante su primer mandato presidencial en 2016, pero no recibió respuesta.

“En el pasado, hemos visto a la RPC actuar de esa manera, en la que parece que quieren trabajar con Taiwán, pero luego crean tantas condiciones previas que hacen que sea muy difícil para las autoridades taiwanesas aceptar porque las ofertas adjuntas con algunas cuestiones de soberanía y reclamos sobre la política de Una Sola China”, dijo.

Incursiones persistentes de China
Las declaraciones de Tsai se produjeron mientras el PCCh aumentaba sus incursiones de aviones de guerra en la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán, la más reciente de las cuales tuvo lugar los días 25 y 26 de diciembre, cuando el PCCh envió 71 aviones y siete barcos hacia Taiwán.

El PCCh reclama Taiwán como parte de su territorio a pesar de que Taiwán es una isla autogobernada con un gobierno elegido democráticamente. El PCCh ha prometido conquistar la isla por la fuerza si es necesario.

En su discurso de Año Nuevo, Tsai instó al PCCh a volver al diálogo y a cooperar para lograr la estabilidad regional a través del estrecho de Taiwán, señalando que ambos países se enfrentan a retos comunes.

“La guerra nunca ha sido una forma de resolver los problemas, y solo a través del diálogo, la cooperación y los esfuerzos conjuntos hacia los objetivos de estabilidad y desarrollo regionales podremos ayudar a que más personas disfruten de seguridad y felicidad”, afirmó.

Tsai anunció el 27 de diciembre que su gobierno ampliaría el servicio militar obligatorio de Taiwán de cuatro meses a un año en 2024 ante la creciente amenaza militar que supone el PCCh para la nación.

“Taiwán quiere decir al mundo que entre la democracia y la dictadura, creemos firmemente en la democracia. Entre la guerra y la paz, insistimos en la paz. Mostremos el coraje y la determinación para proteger nuestra patria y defender la democracia”, afirmó.

Con información de Lisa Bian y Sean Tseng. Fuente: The Epoch Times en español